La firma electrónica para las promotoras inmobiliarias

¿Qué es la firma electrónica?

La firma electrónica es un concepto jurídico, equivalente electrónico al de la firma manuscrita, donde una persona acepta y da por validado el contenido de un mensaje electrónico a través de cualquier medio electrónico que sea legítimo y permitido.​​​

¿Cómo funciona la firma electrónica y cuál es su validez jurídica?

Para entrar dentro de un marco legal y tener validez jurídica, al igual que la firma manuscrita, la firma electrónica se apoya en la ley.

En España, la ley 59/2003 del 19 de diciembre sostiene que “El Real Decreto Ley 14/1999, de 17 de septiembre, sobre firma electrónica, fue aprobado con el objetivo de fomentar la rápida incorporación de las nuevas tecnologías de seguridad de las comunicaciones electrónicas en la actividad de las empresas, los ciudadanos y las Administraciones públicas. De este modo, se coadyuvaba a potenciar el crecimiento y la competitividad de la economía española mediante el rápido establecimiento de un marco jurídico para la utilización de una herramienta que aporta confianza en la realización de transacciones electrónicas en redes abiertas como es el caso de Internet.”

En la Unión Europea, la reglamentación eIDAS (Electronic IDentification And Trust Services) regula la identificación electrónica y los servicios de confianza para las transacciones electrónicas dentro de los 28 Estados miembros de la comunidad europea. La reglamentación eIDAS define y enmarca la firma electrónica, su funcionamiento y sus usos.

La firma electrónica para servir al sector inmobiliario

Desde hace varios años, el sector inmobiliario se está digitalizando gracias a la llegada de nuevas tecnologías. Estas innovaciones han sido pensadas para simplificar las profesiones y los procesos actuales del sector. Entre estas innovaciones tecnológicas, la firma electrónica es una de las más significativas.

Constructoras, promotoras, agentes inmobiliarios o arquitectos entre otras profesiones inmobiliarias, deben rellenar numerosos documentos financieros, administrativos y jurídicos en sus tareas cotidianas. Lo que también conlleva a menudo desplazamientos, idas y vueltas interminables entre las diferentes partes debido a una falta de documentación.

Esta parte administrativa tan importante y las decepciones que trae consigo causa una pérdida significativa de productividad y eficacia en el plano marketing y comercial. También trae consigo la insatisfacción de los futuros compradores, hartos de todo el papeleo interminable, que finalmente puede incluso causar estrés. Para responder a estas contrariedades y facilitar el día a día de los trabajadores, la firma electrónica apareció en el sector inmobiliario.

Las ventajas de la firma electrónica

Ahorro de tiempo

La firma electrónica permite a las promotoras inmobiliarias ahorrar un tiempo considerable enviando sus documentos a firmar electrónicamente e instantáneamente a los compradores de bienes inmuebles. Así pues, estos últimos, pueden firmar a su vez los documentos más fácil y rápidamente que con la firma manuscrita ya que, para esta última, se necesitan numerosas impresiones y está sometida a los plazos de envíos postales cuando se hace a distancia, sobre todo en periodo de confinamiento.

Mejora de la experiencia cliente

Al utilizar la firma electrónica, las promotoras inmobiliarias reducen los plazos de las ventas. Por otro lado, el recurso a la firma electrónica hace que el proceso de compra de los clientes sea menos pesado, ya que no tienen que imprimir y firmar largos expedientes, ni reenviarlos para la contrafirma.

Gracias a la firma electrónica, todo es más rápido y los clientes ya no tienen que desplazarse.

Otra ventaja, los documentos pueden ser guardados en un smartphone o en un ordenador y se pueden consultar en todo lugar y en cualquier momento. Esta rapidez y esta facilidad suelen ser muy apreciadas por los compradores.

Mejora de la productividad

Gracias al ahorro de tiempo, la firma electrónica también permite a las promotoras inmobiliarias ser más productivas y evitar perder tiempo en las tareas administrativas. Este tiempo ganado conlleva que se lleven a cabo más acciones comerciales, que se mejore el marketing inmobiliario y que se esté más disponible para el cliente.

Por otro lado, el software para digitalizar las ventas inmobiliarias de Unlatch también permite a los promotores generar rápidamente los contratos de reserva y de compraventa para sus clientes. Este sistema, que tiene la firma electrónica integrada, permite a los clientes de Unlatch ganar tiempo en la gestión de sus ventas y mejorar la experiencia cliente de los compradores gracias a la reducción en los plazos de venta y a su disponibilidad y transparencia permanentes frente a sus clientes.